
¡Buenas noticias!
Hoy en día estamos constantemente rodeados de malas noticias. Ya sea en los canales de noticias, en Internet o en las redes sociales, parece que la negatividad está por todas partes: política, guerra, economía y más. ¿No es hora de escuchar algo positivo? Me encantaría compartir buenas noticias contigo.
El problema
El problema que todos enfrentamos es que el pecado nos separa de Dios. Todos pecamos, tanto por naturaleza como por elección, y debido a esto, merecemos el castigo de Dios. El pecado también es la causa de todo el mal, sufrimiento y tristeza en el mundo. La Biblia enseña que el resultado de nuestro pecado es la muerte, tanto física como espiritual. Pero hay buenas noticias: Dios tiene una solución para este problema.
La provisión
Esa solución es Jesús. Dios envió a Jesús, Su único Hijo, para vivir sin pecado y morir en nuestro lugar por los errores que hemos cometido. A través de Su muerte, Jesús satisfizo la ira de Dios y quitó nuestro pecado. Luego, tres días después, resucitó de entre los muertos, venciendo al pecado y su poder.
La promesa
La Biblia promete que, si confiamos en Jesús como nuestro Salvador, Él perdonará nuestros pecados, nos dará una vida nueva y nos concederá vida eterna con Él en el cielo, un lugar sin dolor ni sufrimiento.
En resumen, las Buenas Noticias son que Dios se hizo hombre en Jesús, haciéndolo completamente Dios y completamente humano. Él vivió una vida perfecta, sin pecado, murió en nuestro lugar para pagar por nuestros pecados y salvarnos, y resucitó de entre los muertos tres días después, victorioso sobre el pecado y la muerte.
Si crees que esto es cierto y quieres reconocer a Jesús como tu Salvador personal, te invito a orar esta oración:
“Dios, gracias por amar tanto al mundo que enviaste a Tu Hijo, Jesús, para que todo el que cree en Él no muera, sino que tenga vida eterna. Jesús, gracias por tomar mi lugar y darme el regalo de la vida eterna. Por favor, ayúdame a vivir de una manera que muestre mi agradecimiento por esta increíble promesa. En el nombre de Jesús, Amén.”